La ropa y los zapatos de ante se han puesto de moda en los últimos años, dando lugar a calzado que va desde sandalias hasta botas. A pesar de que se trata de un material que confiere a este complemento un aire moderno se trata de un tejido complicado de limpiar debido a que el ante es bastante delicado.
A pesar de tratarse de un tejido elegante a la vez que cómodo, es bastante delicado, de manera que el roce derivado de su uso, o el agua de la misma lluvia pueden dañar su superficie. Es por ello, que es recomendable que empleemos una solución impermeabilizadora que nos va a facilitar en sobremedida su mantenimiento, alargando considerablemente su vida útil. Este producto crea una capa resistente que repele los líquidos
Para limpiar productos de ante podemos recurrir a un cepillo de dientes de cerdas suaves y cepillar los zapatos en el sentido que marcan las fibras de la prenda. Una goma de borrar puede ayudarnos a eliminar pequeñas manchas de suciedad que hayan resistido al paso del cepillo.
Otra opción es pasar un paño limpio ligeramente humedecido y frotar suavemente a favor del tejido. En el caso de que los zapatos de ante estén muy sucios conviene lavar los zapatos por completo sumergiendolos en agua con jabón neutro y pasaremos el cepillo de dientes.